El as español Fernando Alonso, bicampeón del mundo de F1 y piloto de desarrollo del proyecto Valhalla, tuvo el honor de bautizar el vehículo durante esta demostración.
El Valhalla marca un hito importante en la historia de la marca británica. Es su primer superdeportivo de motor central producido en serie, pero también su primer modelo híbrido enchufable. El desarrollo del vehículo se vio reforzado por la colaboración directa con Aston Martin Performance Technologies, el brazo técnico del equipo de F1 Aston Martin Aramco, especializado en dinámica, aerodinámica y materiales.
Tiene un sistema de propulsión híbrido con 1.079 caballos de potencia y 1.100 Nm de par. Este sistema combina un motor V8 de cigüeñal plano biturbo de 4.0 litros que desarrolla 828 caballos de fuerza, con tres motores eléctricos que generan 251 caballos de fuerza adicionales. La transmisión se realiza mediante una caja de cambios de doble embrague de ocho velocidades con diferencial electrónico. Este sistema permite una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,5 segundos y una velocidad máxima de 350 km/h, limitada electrónicamente.
Si bien era de esperar que el interminable Fernando Alonso tuviera sólo cosas buenas que decir sobre el auto, el piloto ibérico quiso destacar que el Valhalla representa una síntesis exitosa entre tecnología de vanguardia inspirada en la F1 y sensaciones de conducción auténticas. El director ejecutivo de Aston Martin, Adrian Hallmark, celebró un momento clave en la rica historia de Aston con una transición electrificada realizada sin sacrificar el ADN deportivo de la marca.
Visualmente, el Valhalla se presentó en un color “Podium Green” inspirado en el monoplaza AMR25, con toques Lime Green. Producido en tan solo 999 unidades, será entregado a sus clientes a partir del segundo semestre de 2025.
Héctor Daniel Oudkerk
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