Citroën C4 X (2022) / El Citroën C4 ofrece una nueva versión de características más familiares...el C4X.

Citroën C4 X (2022)

Confirmando la fuerte tendencia de los sedanes grandes elevados en Stellantis, después del C5 X y el Peugeot 408, este C4 X parece prometedor, en términos de practicidad, como sus primos.

Adoptando la letra X, de uso frecuente en los segmentos de 4×4 y otros SUV, se habría pensado en una variante elevada, con tendencia aventurera, del C4. Sí, pero aquí está, el C4 ya ha adoptado, desde 2020, un perfil alto. Este C4 X, por tanto, no tiene más alma de aventurero que su hermano pequeño, definiéndose más como su variante “limusina” encarnada por su voladizo trasero que se alarga 24 cm hasta alcanzar los 4,60 m, aumentando el volumen del maletero de 380 l. a 510 l (+130 l).

Citroën C4 X (2022)

Citroën C4 X (2022)

Citroën C4 X (2022)

Pero el panorama se oscurece en términos de accesibilidad, a falta de un portón trasero, quedando la luneta trasera irremediablemente fija. A diferencia del C4, hay que contentarse con una tapa del baúl de apertura reducida, que además queda obstruida por las bisagras, debajo de la ventanilla, y por las luces traseras de una sola pieza, en el lateral. 

También su umbral de carga sube 3 cm respecto al C4, aunque los dos tienen la misma altura total de 1,52 m, o incluso que la distancia entre ejes no cambie ni un ápice, alcanzando un máximo de 2,67 m. El espacio para las piernas de los pasajeros traseros, si resulta correcto, carece de generosidad para una berlina especialmente destinada a profesionales, como los taxis. Sin embargo, es una variable esencial en determinados mercados internacionales, como China. Pero, según Citroën, este C4 X está destinado principalmente a Oriente Medio y África, además de Europa.

Nada que reseñar de las plazas delanteras, ya que el tablero procede directamente del C4, salvo que la pantalla táctil actualiza su software para beneficiarse de la interfaz inaugurada recientemente por el C5 X.

Citroën C4 X (2022)

Debajo del capot, está el motor de 3 cilindros disponible en caja de cambios manual de 100 hp y automática de 8 velocidades de 130 hp. Una transmisión EAT8 que también va bien con el único motor Diésel de 130 CV. Además, un ë-C4 X 100% eléctrico preside esta gama, heredando los 100 kW (136 CV) del ë-C4, así como su batería de 50 kWh, que promete recorrer tantos kilómetros como su hermano pequeño, es decir, unos 360 km WLTP. 

Esta caída del techo suavemente inclinada obligó a los diseñadores a revisar el estilo de la popa luciendo nuevas luces en forma de flecha, inspiradas en el C5 X, cuando la tercera ventana lateral se reduce a su expresión más simple en favor de un pilar C del color de la carrocería. Por lo demás, desde el paragolpes delantero hasta las puertas traseras, todos los componentes de su carrocería proceden del C4.

El nuevo Citroën C4 X debería tener un precio ligeramente superior al C4, con un nivel de entrada que, sin embargo, probablemente se mantendrá por debajo de los 25.000 €.

Hèctor Daniel Oudkerk