jueves, 17 de octubre de 2019

Test exigentes....Jaguar I-Pace bloquea extrañamente la rueda delantera durante la prueba del alce dificultando su realización. Se debe a un comportamiento exagerado del ESC cuya acción protectora se vuelve en contra.


La legendaria prueba del alce descubre las debilidades de muchos vehículos en el mercado y lo ha hecho ahora con el Jaguar I-Pace.
Uno podría considerar que el Jaguar I-Pace tiene una ventaja sobre muchos otros vehículos porque es un EV con gran parte de su peso en el piso, lo que resulta en un centro de gravedad más bajo que algunas alternativas de ICE. Si bien esto permite que el crossover eléctrico tenga poco rolido, una prueba reciente del alce con el I-Pace mostró un problema con su sistema ESC.
En todas las pruebas realizadas, el I-Pace pasaba rápidamente el primer giro a la izquierda pero cuando el conductor gire repentinamente la rueda hacia la derecha, se activa el sistema de control de estabilidad (ESC) para bloquear la rueda delantera del lado del conductor y deslizarse subvirando por varios metros. Esto significaba que el I-Pace no pudo completar la prueba de los alces sin golpear los conos.
Esto es un mal resultado para cualquier vehículo, particularmente uno tan caro y premium como el I-Pace.
Parecería que el problema radica en cómo se ha programado el sistema electrónico de control de estabilidad. El sistema debería intervenir en tales escenarios de conducción, pero no debería bloquear una rueda, lo que provocaría un deslizamiento incontrolable. Jaguar no ha comentado los resultados, aunque la capacidad de actualizar el automóvil por aire podría significar que la compañía británica simplemente necesita desarrollar y lanzar una actualización para evitar que el ESC se comporte de esta manera en el futuro.

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