El medio francés agenda-automobile.com hizo una evaluación del nuevo Toyota Mirai por las carreteras galas como para tener las primeras impresiones del revolucionario modelo recientemente actualizado y ya en venta en varios países de Europa.
Hasta ahora, para muchos, el Toyota Mirai era como un espejismo. Una especie de prototipo muy difícil de encontrar aún en regiones como París, en dónde para dar con alguno había que dirigirse a la red de estaciones de servicio que distribuyen hidrógeno.
Recordemos que Air Liquide, que fabrica hidrógeno para estos autos, está haciendo inversiones masivas para intentar dar nueva impulso a este auto eléctrico con fuel cell en su competencia con los vehículos eléctricos de batería. También Michelin ha creado la joint venture Symbio en asociación con Faurecia para desarrollar la producción de hidrógeno, por lo que vemos que el tema del H2 se está moviendo en países como Francia, Alemania, Corea y sobre todo Japón.
Dentro de los alimentados por H2 los más populares por el momento son el Hyundai Nexo, que es un SUV que es utilizado por una flota de taxis, y este Toyota Mirai, cuya primera generación de estilo experimental dió paso al modelo algo más convencional actual y que es el evaluado.
Muy grande en el exterior (4,97 m de largo), el Mirai, por otro lado, tiene mucho espacio en el interior, especialmente en la parte delantera, donde el conductor y el pasajero están frente a un tablero envolvente.
El antiguo era solo un 4 plazas, el nuevo ofrece 5, pero con un «túnel de transmisión» muy alto debido al tercer tanque de H2 que dificulta la permanencia en el centro del asiento posterior. De hecho está más destinado a dos pasajeros traseros, con un gran reposabrazos central que permite controlar una serie de funciones (asientos con calefacción o ventilación, radio, aire acondicionado) una vez en su sitio.
La principal novedad de este este nuevo Mirai es que tiene tracción trasera mientras que en la que primera versión era delantera. Esto permitió a los ingenieros modificar las entrañas de la máquina, albergar la celda de combustible (fuel cell) que transforma el hidrógeno en electricidad debajo del capot y aumentar el tamaño y la cantidad de tanques (3 en lugar de 2). permitiendo así ganar un 30% de autonomía, o aproximadamente 650 km, la homologación WLTP está en curso.
Desde los controles de esta nave «espacial», no se puede escuchar mucho. Incluso aún cuando la tecnología de pila de combustible normalmente ruidosa está muy bien filtrada. Se puede ver mucha información en el parabrisas. Podría decirse que es la pantalla de visualización frontal más grande en la producción automotriz. Con el acelerador a fondo, el Mirai no despega instantáneamente como cualquier otro automóvil eléctrico. Sus aceleraciones son suficientes, pero suaves. ( recordemos que eroga 182 caballos de fuerza para 1.900 kg), incluso aún cuando el valor de par es respetable (300 Nm desde 0 como cualquier eléctrico), no puede esperarse demasiada deportividad.
Pero estos datos encajan bien con el interior sofisticado y muy futurista de este japonés. Evidentemente, su tamaño y peso lo convierten en un modelo muy confortable con un dinamismo decente y, que en definitiva proporciona placer de conducción pero sin aspiraciones deportivas ni aceleraciones fulgurantes . Hay que decir que su modo de funcionamiento sumerge al conductor en un nuevo mundo muy diferente al de los automóviles normales a los que estamos acostumbrados. Ya como ejemplo tenemos el botón H2O, que permite evacuar el agua generada por la pila de combustible, y que es en sí mismo el símbolo de una nueva movilidad verde.
Sin embargo, no nos dejemos cegar por la gran promesa ecológica de este tipo de vehículos. Por supuesto, se ha avanzado. Por supuesto, el auto solo emite agua. Pero el hidrógeno ahora se fabrica el 95% es de forma «gris», en lugar de «verde». Porque si bien este gas existe naturalmente en la corteza terrestre, en la actualidad se produce a gran escala e industrialmente en alrededor de 80 millones de toneladas por año, para diversas aplicaciones, incluido el refinado de petróleo …pero con tecnología no santa.
La mayor parte del hidrógeno se produce mediante la técnica de reformado con vapor, que claramente, proviene de combustibles fósiles, generalmente gas natural, que pasa a través de catalizadores metálicos en vapor a alta presión, hasta 1000 ° C. Esta técnica produce mucho CO2: de 10 a 11 toneladas para producir una tonelada de hidrógeno … Según Irena (la Agencia Internacional de Energías Renovables), la producción mundial anual de hidrógeno es responsable de la emisión de alrededor de mil millones de toneladas de CO2. El hidrógeno también se puede producir mediante la gasificación del carbón, una técnica que afortunadamente se está abandonando porque es aún más contaminante . La producción por electrolisis es por el momento porcentualmente bajo y aquí también habría que considerar el origen renovable o no de la producción eléctrica necesaria para el proceso. Como vemos todo un tema y muchas mentiras ecológicas de por medio…
Si a esto le sumamos las dificultades de transporte, almacenamiento y distribución, notamos que el hidrógeno tiene algunos retos no menores que superar. Lo cual podría lograrse gracias a las inversiones masivas de todas, organizaciones públicas o privadas, pero también al desarrollo, en primer lugar, de vehículos industriales como autobuses o camiones (como ejemplo Hyundai entrega sus camiones a XCient hidrógeno para Suiza), que podría utilizar perfectamente este combustible todo para dar más escala comercial al H2. Para el automóvil, por lo tanto, tendremos que esperar un poco, pero la revolución está en marcha. Al menos, eso es lo que nos dicen.
El Toyota Mirai, aunque ahora se encuentra en el rango de la gran berlina elegante y tradicional, mantiene su lado laboratorio, por dentro y desde el volante. Esto es lo que hace su encanto y lo que despierta la curiosidad. Toyota espera vender 1.500 al año en Europa. Esto es el doble que en los últimos 6 años combinados. Dados los anuncios sobre inversiones y el deseo de fabricar más hidrógeno verde, el discurso político se mantiene. ¿veremos que decide la calle? Esto solo el pasar del tiempo lo responderá.
Toyota Mirai – Ficha técnica
Longitud: 4,97 m
Ancho: 1,88 m
Altura: 1,48 m
Distancia entre ejes: 2,92 m
Capacidad del baúl: unos 300 litros
Motor: eléctrico síncrono con imanes permanentes
Potencia: 182 ch
Par: 300 Nm
Transmisión: ruedas traseras
Pila de combustible: 330 pilas, densidad 4,4 kW / l
Tiempo de carga: alrededor de 5 minutos en la estación.
Alcance: 650 km
0 a 100 km / h: 9.2 segundos
Velocidad máxima: 175 km / h
fuente: agenda-automobile.com
