Nissan indicó que no fabricaría la nueva generación del March europeo, allí vendido como Micra, en Brasil. En la época, la justificación era el refinamiento del modelo, que acabaría dejando el modelo final muy caro. Sin embargo, una receta a la brasileña siempre estuvo en discusión y, aparentemente, debe por fin salir de los proyectos. La marca japonesa registró los diseños interno y externo del compacto en Brasil, sirviendo al menos de inspiración para las líneas definitivas del homónimo del Mercosur. Las ventas comienzarían en 2019.
Por las imágenes registradas por Nissan junto al Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (Inpi), se puede decir que el March nacional prácticamente no cambiará en relación al europeo. Sin embargo, debe tener una carrocería simplificada, para reducir los costos. Por cierto, no sólo ella: la plataforma local será una evolución de la actual, la V, que ya da base al Kicks. Se refuerza con respecto a la arquitectura aplicada en el hatch y el Versa.
Internamente, el March nacional también acompañará al primo "desarrollado". Sin embargo, el acabado será más espartano, como ocurre entre los Volkswagen Polo de las dos regiones. El japonés también debe perder algunos equipos para ser más accesible.
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