Skoda quiere revolucionar los SUV con el Vision O. Un concepto que bien podría revitalizar una silueta del familiar a menudo olvidada.
Bautizado como Vision O, este prototipo totalmente eléctrico prefigura la próxima generación de modelos de la familia Skoda y se posiciona como el heredero espiritual del Octavia y el Superb Combi. La idea es olvidarse de los SUV, esos falsos todoterreno que se asustan con el más mínimo charco de barro, y dar paso al formato ideal para familias que buscan espacio y elegancia. 
El diseño Modern Solid de Skoda evoluciona hacia una mayor sobriedad. Las líneas son limpias, los volúmenes se reducen a lo esencial, todo con un enfoque en la aerodinámica y la eficiencia energética. El frente presenta una firma luminosa llamada Tech Loop, que recorre todo el ancho del vehículo e integra sensores y radares. Lateralmente, el Vision O destaca por su distintivo acristalamiento, un capot largo y llantas optimizadas para reducir la resistencia aerodinámica. En la parte trasera, el patrón de iluminación en forma de "T" para resaltar su identidad visual.
El interior mantiene el mismo enfoque minimalista. El clásico cuadro de instrumentos ha desaparecido: lo sustituye una pantalla Horizon Display de 1,20 metros de largo que se extiende por todo el tablero. Una gran pantalla vertical central completa el conjunto, combinada con algunos controles físicos para una mayor ergonomía. Skoda también enfatiza los materiales sostenibles de su concepto, incorporando tejidos reciclados, cuero procedente de retales y materiales vegetales. 
Héctor Daniel Oudkerk
En cuanto a usabilidad, el station wagon conserva su característica principal: un baúl de 650 litros, al que se suman características como un altavoz Bluetooth extraíble y una mini heladera. El Vision O también incorpora una inteligencia artificial llamada Laura, capaz de asistir a los pasajeros, gestionar las tareas cotidianas o incluso contar cuentos a los niños durante los viajes largos. 
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