Ryan Blaney (Ford Mustang del Team Penske) ganó la carrera de Daytona anoche, por delante de un grupo de pilotos que luchaban por conseguir un puesto en los playoffs.
La última carrera de la temporada regular de la NASCAR Cup Series cumplió con las expectativas, como suele ocurrir en un circuito de carreras como Daytona, donde casi todos tienen la oportunidad de ganar, y el sistema de playoffs ofrece un puesto a cualquier piloto que gane durante la temporada, lo que lo convierte en una oportunidad importante para quienes aún no han podido visitar el Círculo de la Victoria.
Catorce pilotos ganaron las primeras 25 carreras del año, dejando dos puestos disponibles para los playoffs, que se disputarán en las últimas diez rondas de la temporada.
Alex Bowman (Chevrolet Camaro del Hendrick Motorsports) y Tyler Reddick (Toyota Camry del 23XI Racing) eran, al inicio de la carrera, los dos pilotos que prácticamente habían conseguido las plazas disponibles, ya que ocupaban los primeros puestos en la clasificación del campeonato. Un decimoquinto ganador diferente, que no fuera uno de ellos, necesariamente los excluiría de los playoffs.
La postemporada comenzará el próximo fin de semana en el legendario óvalo de Darlington. Cada tres carreras, los cuatro últimos pilotos de la clasificación serán eliminados, hasta que solo queden cuatro para luchar por el título en Phoenix el próximo noviembre.
Héctor Daniel Oudkerk







No hay comentarios:
Publicar un comentario