Los autos deportivos como es el caso del nuevo Corvette son muy bajos con apenas altura libre al suelo. Cuentan con splitters prominentes, elementos de fibra de carbono y fondos planos que mejoran su rendimiento aerodinámico. Un badén o un lomo de burro se pueden convertir en una carísima broma, y en algunos casos, un obstáculo infranqueable. Algunos automóviles equipan un sistema hidráulico que eleva el morro unos centímetros para poder superar estos obstáculos que la vida nos pone en el camino. El Chevrolet Corvette C8 tiene un sistema así, pero la novedade es que está sincronizado con el GPS y puede almacenar hasta 1.000 obstáculos en su memoria. El sistema funciona mediante actuadores hidráulicos y eleva el morro del coche en 41 mm en sólo 2,8 segundos. Esto permite al coche superar ciertos badenes o cuestas, que ponen en aprietos su bajo "ángulo de ataque". Funciona hasta los 40 kmh.
El nuevo deportivo americano es el más tecnológico de su historia, el primero en tener una disposición de motor central y el primero en prescindir de un cambio manual. Pese a ello, su precio de acceso rondará nada más que en 60.000 dólares
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