Para empezar se seleccionó a Mostech y KRE, para desarrollar los motores Ford y GM para Gen3 respectivamente.

Tras varios meses de negociaciones entre el jefe del Supercars, Adrian Burgess, el fabricante norteamericano General Motors y el preparador de motores KRE Race Engines, se llegó a la conclusión de que en el Chevrolet Camaro Gen3 instalará un V8 aspirado de 5.7 litros, dejando a un lado la opción de 6.2 litros. De esta forma, el propulsor asignado será muy similar al utilizado en la NASCAR. Por su parte, el Ford Mustang llevará un V8 de 5.4 litros, así que deberá establecerse una paridad mecánica y para tal fin se tiene previsto acudir a Ilmor para que los auxilie en caso de que sean demasiadas las diferencias entre la capacidad, el consumo y las especificaciones.

Actualmente tanto el Holden Commodore como el Ford Mustang compiten con motores V8 de 5.0 litros, desarrollados por KRE Race Engines y Mostech Race Engines respectivamente.

Ford V8 5.4 by Mostech Race Engines

Chevrolet V8 5.7 by KRE Race Engines

El nuevo Gen3 está lejos de ser un coche de producción, básicamente es un chasis tubular de un novedoso concepto y que incorporará un motor que no está disponible en ningún modelo comercial. En este caso, General Motors deberá enviar hasta Australia un lote de motores según la cantidad de equipos que los soliciten, quedando en los preparadores los costos para mantenerlos operativos.

fuentes Speedcafe y Diariomotor competición