Utilizando la plataforma MEB del Grupo Volkswagen, el nuevo A3 Sedán está disponible con la última tecnología de conducción híbrida suave de 48 voltios de Audi. |
El Audi A3 Sedán 2020 es la segunda carrocería del compacto alemán. Comparte multitud de elementos con el Sportback. Tendrá rivales diferentes a los de éste. Entre ellos se encuentran el BMW Serie 2 Gran Coupé y el Mercedes-Benz Clase A Sedán.
El Audi A3 Sedán 2020 se diferencia del Sportback principalmente en la forma de su carrocería que gana 15 centímetros de longitud hasta alcanzar 4,5 metros.
El frente del Audi A3 Sedán 2020 se caracteriza por la presencia de una parrilla Singleframe flanqueada por unas ópticas que en la versión más completa cuentan con tecnología Matrix led. |
La versión más aerodinámica del Audi A3 Sedán 2020 anuncia un Cx de 0,25, algo que se explica en parte por la presencia dentro de la parrilla Singleframe de dos módulos de lamas controladas de forma electrónica y que regulan el flujo de aire.
Audi anuncia que el nuevo A3 Sedán 2020 cuenta con una posición de conducción más baja, lo que unido a su mayor altura respecto al modelo saliente hace que exista una mayor distancia hasta el techo.
El baúl del Audi A3 Sedán 2020 tiene 425 litros de capacidad, 45 más que éste y exactamente la misma que el anterior A3 Sedán.
El nuevo Audi A3 Sedán 2020 está disponible con cuatro niveles de acabado diferentes. El básico, el Advanced, el S line y el Black Line Edition. Las diferencias entre ellos son las mismas que en el caso del A3 Sportback.
El A3 Sedán de nueva generación cuenta con múltiples ayudas a la conducción, entre las que se encuentra el Audi pre sense front, una cámara de vídeo colocada tras el espejo retrovisor del interior que, combinada con un radar dispuesto sobre el frontal del coche, ayuda a prevenir accidentes o, como mínimo, a reducir su gravedad.
La gama mecánica inicial del Audi A3 Sedán 2020 se compone de tres motores, dos de ellos de nafta –uno de ellos, la versión 'mild-hybrid' del primero– y uno Diesel.
El primero de los naferos es el que corresponde a la versión 35 TFSI, que es un 1.5 litros de cuatro cilindros con 150 caballos que se puede asociar tanto a un cambio manual de seis velocidades como a uno automático S tronic de siete. En el caso de elegir el automático aparece la segunda de las opciones, puesto que el motor se apoya en un sistema 'mild-hybrid' de 48 voltios capaz de recuperar energía durante las fases de decelaración y apoyar al motor de combustión con hasta 50 Newton metro de par máximo al arrancar o al acelerar desde baja velocidad. También permite al coche circular en ocasiones con el motor de combustión desconectado. Audi anuncia un ahorro de 0,7 litros de carburante cada 100 kilómetros.
En Diesel el protagonista es el 2.0 TDI de 150 caballos, que viene en todo caso con un cambio automático S tronic de siete velocidades.
Más adelante llegarán otros motores, entre ellos el 1.0 TFSI de tres cilindros –versión 30 TFSI– que supondrá la versión de acceso del modelo y que contará con 110 caballos de potencia. Estará disponible con cambio manual o automático, en este último caso también como 'mild-hybrid'.
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