lunes, 5 de noviembre de 2018

DS pretende mejorar su imagen de marca lanzando un sedán. Opiniones en la misma Francia

Pero, ¿será el futuro DS8 lo suficientemente ambicioso como para enfrentar a los alemanes..? 
Durante algún tiempo, muchos modelos se han proclamado "la nueva punta de lanza de la producción francesa". Si bien es cierto que el DS7 Crossback tiene argumentos serios, no obstante, es un SUV, técnicamente cercano al Peugeot 3008. Para brillar internacionalmente, se debe apuntar más alto... En el lado de los leones, el nuevo 508 ha tenido buena repersución, pero se limita al segmento de Audi A4 y BMW Serie 3. Finalmente, el único capaz de asegurar el estatus de reina de la tricolor en 2018 es un deportivo: el Alpine A110. Pero Francia todavía carece de un sedán real, capaz de preocupar a sus queridos vecinos alemanes. El futuro DS8, que se presentará en la segunda mitad de 2019, ¿será lo suficientemente exitoso como para asumir este papel?
 La llegada de un gran sedán dentro de la gama DS parecía inevitable, para honrar la memoria del modelo homónimo, que una vez fue propiedad de Citroën. Sin embargo, se necesitaron más de diez años para hacer realidad esta fantasía, debido a la falta de afecto del público en general con las berlinas ya que prefiere el SUV. Ya podemos agradecer al mercado chino, aficionado a los sedanes, por haber alentado al grupo de PSA a desarrollar el DS8. Es además de la fábrica de Shenzen, en China, que tendrá la exclusividad de su producción. Para tener la oportunidad de conseguirlo en Francia, el DS8 tendrá que recorrer los pocos miles de kilómetros que lo separan de su continente nativo.
En que campo será en el que deberá enfrentarse a la competición alemana ?. Especialmente por su longitud anunciada (4,85 m), jugará con armas pequeñas contra las reinas de la categoría, como el BMW Serie 5 (4,94 m). ¿Pero será realmente su vocación? Pareciera que optará, como el SUV DS 7 Crossback, por una posición ubicada a horcajadas entre dos categorías. Como el PSA ya está buscando en los terrenos del BMW Serie 3 con el nuevo Peugeot 508, es una apuesta segura que el corazón objetivo de este DS8 es una categoría superior.
En donde no hay duda es en la presentación interna del DS8 que se eleva en comparación con la competencia alemana. Incluso podría reprocharlos, en términos de refinamiento. En los plásticos espumados de Audi, BMW y Mercedes, los franceses se replicarán con una cabina forrada de cuero y Alcantara.
Por el contrario, el DS8 palidecerá en términos de rendimiento. En el mejor de los casos, el DS tendrá la mitad del poder promedio mostrado por sus rivales teutónicos, capaz de alcanzar más de 500 hp. En el mejor de los casos, su salvación vendrá de su motor híbrido recargable, del cual solo obtendrá 225 hp, al principio. Se prometerán 50 km de autonomía en todo eléctrico. M
Posteriormente, el DS8 podría ver incrementado su potencia a 300 hp, híbrido enchufable o 350 hp, como sugieren algunos rumores. En este caso, lamentablemente verá su volumen de arranque parcialmente sacrificado, para acomodar un segundo motor eléctrico en su eje trasero. Sus futuros compradores se consolarán al saber que, en batalla, el DS8 ganará una transmisión completa. Pero todos estos esfuerzos serán inútiles, para preocuparse por los bloques de seis y ocho cilindros que disfrutan de la Clase A6, Serie 5 y E, que ofrecen hasta 600 CV.
En su lanzamiento comercial a principios de 2020, el DS8 debería negociarse a un precio de alrededor de € 40,000, como mínimo. Un precio básico que se compara con los 45.850 € reclamados por el BMW Serie 5 de nivel de entrada, por ejemplo. Entonces, ¿logrará ser de gama alta este DS8 como para luchar frente a los alemanes? Es permisible dudarlo.

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