Cabe destacar que a pesar de la sofisticación de esta función, Tesla sigue estando "oficialmente" en el nivel 2 de conducción autónoma... es decir que el conductor debe permanecer siempre atento y poder intervenir en todas las circunstancias. El sistema de Tesla no es tan avanzado aún como el de Honda, que alcanza el nivel 3 (en algunas circunstancias muy específicas). Este último nivel significa que el conductor ya no necesita prestar atención a la carretera. Claro que la tecnología de Honda solo funciona en la carretera, mientras que el "FSD" de Tesla también está operativo en la ciudad y en las carreteras rurales.
Lo cierto es que todavía se requiere la atención del conductor, como lo recuerda constantemente Tesla: de los primeros cien clientes que se prestaron a testear el sistema, algunos ahora fueron excluidos porque "no prestaron suficiente atención a la ruta".
Elon Musk también anuncia el siguiente paso de su sistema: el piloto automático pronto (abril) ya no necesitará el radar de la parrilla para estimar la distancia entre él y el automóvil de adelante. El software será lo suficientemente inteligente como para trabajar solo con las imágenes de la cámara.
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