LAS INDY 500 SÓLO SE CORRERÁN SI HAY PÚBLICO PRESENTE...Roger Penske fue claro al respecto.

La decisión de celebrar el fin de semana de carreras en NASCAR e IndyCar del 4 y 5 de julio a puerta cerrada generó descontento en una parte de los aficionados y residentes de Indiana.

Pero el nuevo dueño de INDYCAR y del autódromo promete que hará todo lo posible para permitir el acceso al público, incluso si eso requiere volver a mover las 500 millas de fecha, que hoy por hoy es el 23 de agosto. 

“Confíen en mí, lo vamos a hacer con público presente. Estamos a favor de tener aficionados en las gradas para agosto, estamos planeando sobre ello y nos sentimos bien. Todavía faltan casi tres meses y creo que estaremos bien. Pero la correremos solo con fanáticos”, afirmó Penske al medio americano RACER, antes de la carrera del sábado pasado en Texas.

“Miren, teníamos un plan para seguir adelante con aficionados el fin del 4 de julio, pero no tenía sentido. No queríamos hacer nada para perjudicar a la Indy 500 y habríamos tenido que ser la excepción, pero decidimos que no podíamos ir temprano”.

“Si tuviéremos fanáticos y tuviéremos algún problema, eso nos cerraría la puerta en Indianápolis”.

Por ello, Penske explicó que la decisión de no permitir público dentro de cuatro semanas fue propia y no por órdenes/recomendación de las autoridades.

Los comentarios de posponer el evento a octubre por  Mark Miles, CEO de Penske Entertainment, planteaba hace un mes reafirman la posibilidad del cambio de fecha de las 500.

Ya que la pandemia del COVID-19 genera un contexto cambiante, la posibilidad de seguir moviendo fechas y cancelando eventos en el calendario sigue latente.

Al momento, el mes de octubre tiene dos fines de semana libres entre el Harvest Grand Prix en IMS (día 3) y la final de temporada en St. Petersburg (día 25), por lo que el formato de 12 días de actividad de las 500’s se acomodarían sin problema.

Hasta el lunes 8/6 a media tarde, según el sistema de rastreo del New York Times, Indiana presenta 38.500 contagiados y 2.316 muertes. El promedio de infectados diarios en la última semana ronda los 400.