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Hace apenas unas semanas el BMW Serie 5 recibió un lifting de mitad de vida con nuevas ópticas , riñones aún más grandes, una instrumentación digital con un equipo de infotainment de nueva generación y motores semi-híbridos. (es decir todo lo que se puede esperar de una actualización) que se incorporan ahora a las versiones deportivas M5. |
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El rediseño, como ocurrió con los BMW Serie 5, no es profundo... el paragolpes es específico a los BMW M5, con tomas de aire laterales muy agresivas. La parrilla está oscurecida y tiene las láminas más separadas. |
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En la parte trasera del coche encontramos unas ópticas ahumadas, un spoiler negro en el portón del maletero y un paragolpes nuevo con cuatro colas de escape, específicas a los M5. |
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En el interior del coche los cambios son ligeros...tenemos una pantalla central que aumenta hasta las 12,3" de diagonal y una nueva instrumentación digital. En el sistema de infotainment contamos con visualizaciones específicas para los modos Sport y Track. |
Junto a la palanca de la caja de cambios hay dos nuevos botones: el botón M Mode nos permite pasar de forma directa entre los modos de conducción Road y Sport, y un botón de setup para personalizar dichos modos.
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A nivel técnico y mecánico, el mayor cambio es la incorporación de los amortiguadores de los BMW M8 Gran Coupé, así como una puesta a punto del chasis aún más rígida y enfocada a la deportividad, que sale a relucir en circuito, según BMW. |
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El BMW M5 Competition hace el 0 a 100 km/h en solo 3,3 segundos. Su suspensión es 7 mm más baja que la del M5 "normal". |
El sistema de tracción total es capaz de desconectar el eje delantero para ofrecer una experiencia de conducción más pura y emocionante, especialmente en pista.
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