Mientras las marcas chinas se expanden por todo el mundo, las compañías tradicionales están pensando cómo les pueden hacer frente para no perder sus lugares en la industria del automóvil global.
En Europa se estudia la posibilidad de formar un Airbus de los automóviles y en Japón sucede algo parecido; hace unos meses, Honda y Nissan anunciaron que unirían fuerzas y ahora Mitsubishi Motors también podría formar parte de esta alianza.
Las marcas chinas son una amenaza para los fabricantes tradicionales y lo han hecho en tiempo récord, por lo que el margen de reacción de las marcas de siempre es mínimo. Mientras algunas administraciones europeas tratan de frenar a China con aranceles, los fabricantes trazan sus propios planes para lograr el mismo objetivo.
Nikkei asegura que Mitsubishi Motors ha firmado un acuerdo de confidencialidad con Honda y Nissan, el segundo y el tercer fabricante de automóviles de Japón, respectivamente, y que las conversaciones para dar forma a esta alianza ya han comenzado.
Si se suman las ventas globales de las tres compañías, este grupo superaría los 8,35 millones de unidades en todo el mundo, con 4,1 millones por parte de Honda, 3,44 millones por parte de Nissan y 810.000 unidades en el caso de Mitsubishi.
El objetivo de la alianza entre Mitsubishi, Nissan y Honda, sería estandarizar el software que controla el vehículo para que los modelos de las tres compañías compartan esta tecnología y puedan ahorrar costos, tanto de desarrollo como de suministro. Este software serviría, además, para que los vehículos de las tres marcas sean más competitivos.
Otra posible finalidad de este acuerdo pasaría por complementar las gamas de las tres compañías para enfrentar a las marcas chinas en el campo del coche eléctrico.
Héctor Daniel Oudkerk (Diario Automotor)
No hay comentarios:
Publicar un comentario