El fabricante de automóviles alemán Apollo Automobil GmbH ahora se vuelve eléctrico con un prototipo de automóvil deportivo.
Poco conocida por el gran público, la marca Apollo se hizo un nombre en 2005 con el Gumpert Apollo, un potente superdeportivo con un motor térmico V8 Audi biturbo de 650 CV.
Después de algunos reveses financieros, Gumpert (ahora Apollo Automobil GmbH) fue comprada en 2016 por un empresario de Hong Kong llamado Norman Choi y por un fondo chino (Consolidated Ideal TeamVenture), que ya era propietario de De Tomaso.
Este impulso viene acompañado de varios centros de desarrollo en Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Japón… especializados en el desarrollo avanzado, ingeniería y puesta a punto de motores de última generación.
Con este nuevo capital, el pequeño fabricante pretende subirse a la ola de los autos eléctricos, sobre todo porque China ahora tiene un verdadero know-how en la fabricación de baterías.
De momento se ha filtrado poca información en la ficha técnica, pero sin duda el Apollo G2J debería ofrecer tiempos mejores que las anteriores producciones térmicas de la marca.
Apollo ha estado trabajando en el prototipo durante más de dos años, avanzando hacia su objetivo de convertirse en una marca exclusiva para vehículos eléctricos. El modelo, cuyo nombre en código es G2J, se encuentra actualmente en una fase de pruebas.
El exterior se caracteriza por superficies esculpidas, guardabarros pronunciados, un frente bajo, unidades de iluminación LED de estilo moderno, entradas dobles en ambos extremos, puertas de mariposa, espejos que reemplazan la cámara y un puerto de carga montado en la parte trasera.
Según Apollo, el G2J está fabricado con "los materiales compuestos ligeros más avanzados" con un chasis de fibra de carbono. Esta plataforma respaldará una gama de vehículos eléctricos centrados en el rendimiento.
Héctor Daniel Oudkerk
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