Musk terminó el miércoles a 3.000 millones de dólares de Bezos, pero unos pocos minutos han bastado para que las acciones de Tesla subieran lo suficiente como para superar esta cifra.
Es bien sabido que Elon Musk no cobra un sueldo, sino que su remuneración consiste en paquetes de acciones que puede adquirir a un precio fijo de 70 dólares por participación cuando Tesla cumple determinados objetivos bursátiles, productivos y económicos.
Tesla es el fabricante de automóviles más valioso del mundo. Su valor de 757.000 millones de dólares supera la suma de las ocho siguientes marcas juntas en el 'ranking': Toyota –209.730–, Volkswagen –100.080–, BYD –90.260–, NIO –83.680–, Daimler –75.950–, GM –61.850–, BMW –56.340– y Ferrari –54.440–.
En las últimas semanas, Tesla ha sido incluida en el índice S&P 500 en un movimiento que ha sido interpretado como el visto bueno de Wall Street tras años de escepticismo y temor a que solo sea una burbuja especulativa.
La progresión del sudafricano es fulgurante, la más rápida de entre los millonarios globales jamás conocida, tal y como ya recuerdan distintos medios norteamericanos, como Bloomberg y CNBC. En julio, el empresario rebasó al veterano inversor Warren Buffett; el pasado mes de noviembre, la fortuna de Musk superó a la de Bill Gates, fundador de Microsoft y ahora la de Jeff Bezos.
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