La nueva planta producirá 150.000 vehículos al año, a partir de 2026 y BYD puede evitar los aranceles a los vehículos eléctricos en Europa fabricando vehículos en Turquía.
Más de 1,4 millones de vehículos fueron construidos en Turquía el año pasado por marcas como Renault, Hyundai y Ford.
El gigante automotriz chino BYD continúa su expansión global y construirá una nueva fábrica de vehículos eléctricos e híbridos enchufables en Turquía. Esta medida mejorará significativamente el acceso de la marca a la Unión Europea al permitirle eludir los recientes aranceles de importación sobre los vehículos eléctricos fabricados en China.
BYD invertirá aproximadamente 1.000 millones de dólares en el sitio, que se espera que esté en la provincia turca de Manisa. Tendrá capacidad para fabricar 150.000 vehículos al año y está previsto que comience a producirse a finales de 2026. El sitio empleará a unas 5.000 personas.
Tras la reciente decisión de la Comisión Europea, BYD se enfrentará a aranceles del 27,5% sobre los vehículos eléctricos que fabrica en China y vende en Europa. Además, Turquía impuso recientemente un arancel adicional del 40% a todos los vehículos chinos para proteger su propia industria automovilística, así como a Togg, el propio fabricante de vehículos eléctricos del país... pero el Presidente Erdogán es un hábil negociador y afortunadamente para BYD, Turquía forma parte de la Unión Aduanera de la UE, lo que significa que los vehículos que fabrica allí pueden exportarse a Europa sin aranceles adicionales y a finales de la semana pasada, el presidente Erdogan le dijo al líder chino Xi Jinping que este arancel del 40% no se aplicaría a las marcas que inviertan en la producción turca, que es exactamente lo que BYD está haciendo ahora.
El acuerdo fue anunciado el lunes en un evento organizado por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en Estambul. No está claro qué proporción de los automóviles producidos en la planta serán vehículos eléctricos frente a los PHEV, pero esto probablemente dependerá de la demanda de los consumidores. (BYD fabrica ambos aparte de sus propias baterías).
En un comunicado, BYD dijo que debido a las "ventajas únicas de Turquía, como su ecosistema tecnológico en desarrollo, su sólida base de proveedores, su ubicación extraordinaria y su mano de obra calificada, la inversión de BYD en esta nueva planta de producción desarrollará aún más las capacidades de producción local de la marca y aumentará la eficiencia logística".
El año pasado se produjeron más de 1,4 millones de vehículos en Turquía, de los cuales aproximadamente el 70% eran turismos de marcas como Hyundai, Toyota, Renault y Ford.
La gran perjudicada es España:
Durante un tiempo se habló de la posibilidad de que BYD instalara en España su segunda fábrica europea. Finalmente, la segunda factoría de BYD que abastecerá Europa en coches eléctricos e híbridos no estará en España, sino en Turquía.
Es la segunda vez que BYD desestima España para instalar una fábrica (al primera fue en favor de Hungría). Y también la segunda que opta por una de las llamadas democracias liberales y no países con gobiernos socialistas que impulsan legislaciones laborales severas que llegan a incluso a disminuir las horas de trabajo, trabar posibles despidos, etc. El resultado real y concreto que no admite discusiones es que BYD se va a Turquía y los obreros españoles sin fábrica. Además la UE se queda sin poder cobrar el impuesto a los autos chinos ahora fabricados o tal vez ensamblados en Turquía...hecha la ley hecha la trampa.
Héctor Daniel Oudkerk (Diario Automotor)
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