El motor de Charles Leclerc del pasado GP de Bahrein no ha sufrido daños graves que obliguen a su sustitución inmediata de cara al GP de China de la próxima semana. El propulsor podrá volver a ser instalado en el auto de Leclerc en las prácticas libres del viernes del tercer evento de la F1 2019.
Después de intensos análisis en Maranello que han dejado claro el problema en el inyector del cilindro 4 (es un componente que se puede sustituir sin incurrir en sanción), según revela La Gazzetta dello Sport, los expertos motoristas dirigidos por Corrado Iotti han terminado que el V6 podrá volver a pista en Shanghai. (Corrado Iotti Head of Powertrain Know How & Design Dept at Ferrari Auto SpA)
Dado que la temporada 2019 debe ser completada con solo tres motores, antes de ser penalizado, tener que instalar ya la segunda unidad en la tercera carrera sería un gran problema, visto que cada propulsor debe durar, al menos, siete grandes premios.
Para el joven piloto es una buena noticia, porque diluye en parte la desilusión por haber visto cómo se le escapaba entre los dedos a 10 vueltas del final su primera victoria en F1. El piloto logró gestionar su caída de rendimiento gracias a la ayuda del muro de boxes y llegar a meta con un tercer puesto que lo colocó cuarto del Mundial, a un punto de Verstappen y por delante de Vettel.
Los técnicos de Ferrari, no obstante, siguen investigando la causa que lastró al propulsor, porque es indudable que el motor sufre problemas de fiabilidad que se han evidenciado ya desde los test de pretemporada en Barcelona.
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