Carlos Ghosn, que el próximo día 11 de abril iba a dar una rueda de prensa para explicar su visión de los hechos que han acontecido desde noviembre del año pasado, vuelve a estar entre rejas.
Los indicios apuntan a una clara malversación que causó la pérdida de unos cuatro millones de euros a Nissan. Parte de ese dinero se desvió a una falsa empesa en Líbano, a través de la cual se sospecha que se pagó el yate personal de Ghosn, mientras que el resto fue a parar a una empresa de inversiones americana que gestionaba uno de sus hijos.
Los abogados del magnate brasileño han distribuido un comunicado en el que el propio Ghosn califica su nueva detención de "escandalosa" y "arbitraria", además de ser "otro intento de parte de individuos de Nissan para confundir a los fiscales y silenciarme". El ex presidente de Nissan ha vuelto a declarar su inocencia.
Esta nueva detención llega justo después de otro anuncio contrario a los intereses de Carlos Ghosn, en esta ocasión por parte de Renault. La marca del rombo ha anunciado que no va a pagarle la cuantiosa renta de jubilación que había solicitado, ni tampoco la parte variable de su salario correspondiente al año 2018.
De esta forma, el caso Ghosn suma un nuevo capítulo tras iniciarse el 19 de noviembre de 2018, momento en el que fue detenido por primera vez hasta el 6 de marzo, cuando se le concedió la libertad bajo fianza. El abogado de Carlos Ghosn criticó lo que llamó el sistema de "justicia de rehenes" de Japón luego de que los fiscales arrestaron por cuarta vez al ex presidente de Nissan y lo encarcelaron una vez más, esta vez por cargos de supuestamente desviar millones de dólares de Nissan para uso personal.
Los fiscales arrestaron a Ghosn luego de una redada matutina en su residencia de Tokio el jueves, aumentando el riesgo legal que enfrentaba el ex presidente de la alianza Renault, Nissan y Mitsubishi.
En su presentación pública, los fiscales dijeron que arrestaron a Ghosn por incumplimiento de las condiciones del arresto domiciliario con sospechas de abuso de confianza por supuestamente haber causado unos $ 5 millones en daños a Nissan desde diciembre de 2015 hasta julio, mientras que Ghosn fue CEO y presidente de la automotriz japonesa.
Ghosn, de 65 años fué nuevamente al el centro de detención de Tokio, donde ya pasó 108 días después de su arresto inicial el 19 de noviembre, dijo el abogado Junichiro Hironaka.
Ghosn estuvo libre por menos de un mes; Fue liberado bajo fianza el 6 de marzo.
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"No podemos negar la posibilidad de que el nuevo arresto se realizó con el propósito de tomar estos materiales", dijo. "Como país civilizado, esto es algo que no debe ser aceptado".
"Usar este nuevo arresto para presionar al acusado es justicia de rehenes", dijo.
El arresto se produjo apenas un día después de que Ghosn se lanzara a Twitter para decir que celebraría una conferencia de prensa el 11 de abril. Ese plan ya estaba en el aire, dijo Hironaka.
"El significado del arresto, para los fiscales, es presionar al Sr. Ghosn, mantenerlo bajo control y evitar que hable libremente", dijo Hironaka.
No estaba claro cuánto tiempo estaría Ghosn en la detención esta vez.
"Esta vez, el dinero fue transferido de una subsidiaria (Suhail Bahwan) de propiedad total de Nissan y terminó regresando a él. Entonces, lo hizo para su propio beneficio", dijo el fiscal adjunto Shin Kukimoto.
La investigación de Nissan encontró cierta evidencia que sugiere que Suhail Bahwan Automobiles podría haber "apoyado" la compra de un yate por parte de Ghosn y haber ayudado a financiar una compañía propiedad del hijo de Ghosn.
Ghosn vows 'I will not be broken' after new arrest; asks French gov't to help
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