Will Power |
Por segundo año consecutivo ningún auto de Penske accedió al Fast Nine, situación que tiene consternado al equipo porque a pesar de haber ganado en 18 ocasiones la estelar carrera y de ser competitivos durante el resto del calendario, ahora observa cómo en esta ocasión su mejor piloto resultó ser el novato Scott McLaughlin, quien se ubicó en el puesto 17.
El drama para Team Penske se acentuó al advertir que Josef Newgarden no pudo mejorar el puesto 21, Simon Pagenaud el 26 y más atrás tanto Will Power como Simona de Silvestro habían quedado fuera de los 30 y clasificaron el domingo con lo justo…. La piloto compite para el equipo Paretta Autosport que está afiliado a Penske, así que por primera ocasión, desde 1995, dos monoplazas asistidos por el más célebre equipo de la IndyCar no aseguran su participación en la Indy 500 el primer día de calificación. La debacle interna ha sido tan fuerte que un campeón como Will Power no tiene tapujos en admitir que los ingenieros no saben que hacer para progresar.
El piloto australiano Will Power, ganador de la edición 2018, puso todo y en un momento llegó a ubicarse en el puesto 18, pero cuando los demás competidores elevaron el ritmo, su registro descendió hasta el fondo y de allí no pudo salir. Power declaró que sus ingenieros configuraron el coche de un modo similar al de Scott McLaughlin y ni aún así pudo ser más rápido, justamente esa situación es lo que tiene desconcertado al equipo. McLaughlin registró una velocidad promedio de 230.557 mph mientras Power no pudo mejorar las 229.228 mph.
Josef Newgarden tampoco comprende cómo un buen monoplaza como el que tiene y que además es asistido por el personal más capacitado de la categoría no puede ni siquiera estar cerca de los mejores coches que instalan motor Chevrolet. Así que es evidente que se trata de un mal fin de semana, pero aún queda la carrera y allí espera que algunos problemas se solucionen.
Está bien que los equipos powered by Honda han mostrado su poderío ya que siete pilotos del Fast Nine son representantes del fabricante japonés y apenas dos, Ed Carpenter y Rinus Veekay, defenderán los intereses de Chevrolet. Por segundo año consecutivo ningún Penske accedió al Fast Nine…y eso no lo deja feliz al capitán Penske.
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