Sería en la zona de Almodovar, conocida por la etapa del Rally de Portugal en la zona del Algarve entre los años 2007 y 2014, donde los dos fichajes probarían las capacidades actuales de un Citroën que a buen seguro tendrá muchas novedades cuando el próximo mes de enero comience el Rallye de Monte-Carlo. Después de que Lappi evolucionará a sus mandos durante el martes y el miércoles, le tocó el turno a Sébastien Ogier, con un mono ignífugo completamente negro y con su habitual casco pintado con los colores de Red Bull, ya sin el logotipo de Ford y con únicamente cinco estrellas de campeón intercontinental.
Ha sido una primera jornada para el francés de recuperar sensaciones después de la euforia de su sexto título. Recordemos que Sébastien Ogier ya pudo probar hace meses el C3 WRC antes de tomar la decisión de volver a Citroën Racing, sin embargo, en esta ocasión no ha tenido que ocultarse, ya en su nueva etapa como líder de la firma de los dos chevrones. Día para encontrar la dinámica de trabajo correcta y para comenzar a conocer a sus ingenieros y técnicos.
Quizás lo más curioso ha sido ver cómo ha aparecido y desaparecido el logotipo de Abu Dhabi precisamente en un momento en el que Citroën está negociando con el que ha sido su patrocinador principal de la estructura francesa desde el año 2013. En gran medida, el éxito de este acuerdo dependerá la posibilidad de tener tres coches a tiempo completo en la próxima campaña, por lo que la decisión de incluir en logotipo en las imágenes oficiales distribuidas por la marca nos puede indicar que las conversaciones van por el buen camino aunque al final de la tarde este fuera tapado con cinta para mantener la unidad de pruebas sin logotipos más allá del 50 que conmemora el medio siglo de asociación con la firma de lubricantes TOTAL.
No hay comentarios:
Publicar un comentario