Hasta 80 km/h, el eléctrico puede impulsar al MG solo, con el térmico de apoyo para recargar la batería, es decir, un modo híbrido en serie. Entonces, los dos motores pueden impulsar el SUV juntos, es decir, un modo híbrido paralelo, en caso de alta demanda de potencia, mientras que en la autopista a velocidad estabilizada, el 4 cilindros se encuentra solo en la tarea.
El MG ZS ha sido revisado en profundidad. De hecho, su carrocería y su interior han sido completamente rediseñados, mientras que el tamaño apenas cambia. El ZS conserva su tamaño compacto, con 4,43 m de largo, así como su tren de rodaje clásico, compuesto por McPhearson adelante y un eje de torsión detrás. Lo más interesante sigue siendo el motor híbrido, completamente diferente al del antiguo ZS. Se trata de un 4 cilindros y 1,5 litros de cilindrada atmosférica, equipado con un ciclo Atkinson. Este grupo, que desarrolla 106 CV, se combina con un motor eléctrico de 136 CV montado a su lado y todo está conectado, mediante un cargador de 45 kW, a una batería de iones de litio de 1,83 kW, situada delante del eje trasero para una mejor distribución de masas. 
Por su parte, la caja nos retrotrae algunas décadas: automática, sólo tiene tres marchas. Todo desarrolla una potencia combinada de 197 CV, tanto más interesante cuanto que el peso del ZS en versión básica no supera los 1.380 kg. El resultado es una aceleración rápida: el 0 a 100 km/h se anuncia en 8,7 segundos, para una velocidad máxima fijada en 168 km/h, más que suficiente. ¿Consumo oficial? 5,1 l/100 km de media.
No hay sorpresas estéticas en el ZS. El conjunto no parece desagradar al mayor número de personas pero sorprendentemente, el interior convence mucho más. 
A pesar de un precio muy agresivo en el interior nos encontramos con plásticos de buena calidad, acolchados no sólo en la parte superior, sino también en la parte media del tablero e incluso los paneles de las puertas están recubiertos de un plástico suave. Mejor aún, el montaje es bueno. 
El tablero es completo, ya que incluye cuentarrevoluciones y termómetro de agua, dos indicaciones que están desapareciendo entre la competencia. En el centro se encuentra otra pantalla, esta multimedia y táctil, pero nada intrusiva. Con una diagonal de 12,3 pulgadas en nuestra versión Luxury, ofrece pantallas bastante claras y una capacidad de respuesta muy aceptable. 
Desafortunadamente, hay que pasar por la pantalla para ajustar el aire acondicionado, que no tiene controles físicos. A favor la presencia de un verdadero mando de la caja de cambios, mucho más ergonómico que los ridículos botones de tamaño insuficiente que tienden a sustituirlo en la competencia y en contra el hecho de que el volante sólo se pueda regular en altura. 
En las partes delantera y trasera, la habitabilidad es excelente en términos de longitud para las rodillas y espacio para la cabeza. Sin embargo, si se pliega en dos partes, no se desliza, a diferencia de un Renault Captur, por ejemplo. Los pasajeros apreciarán la presencia de bolsillos, compartimentos en las puertas, una salida de aire y una toma USB. 
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En cuanto al baúl, se accede a él a través de un portón trasero manual, pero no demasiado pesado. Su volumen se adaptará al mayor número de personas, variando de 443 l a 1.457 l con los respaldos abatidos. El MG todavía ofrece almacenamiento adicional debajo del piso.  |
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